La discordia entre el pueblo árabe y los judíos es algo que viene desde época muy antigua, pero, Porque tanto odio?
La respuesta se podría resumir en una historia que se encuentra en el libro santo, trata de Sara, la esposa de Abraham, la cual era avanzada edad al igual de Abraham, ellos no podían tener hijos, pero cierto día el Dios de Abraham se le apareció en su tienda y le hizo una promesa a su siervo Abraham de tener hijos, de poseer una descendencia incontable más que las estrellas del universo y la arena del mar, que mas que promesa parecía una utopía, pero a la vez una bendición.
El siervo Abraham confiaba en la promesa de su Dios, pero la situación se ponía cada vez más difícil ya que pasaban los años y no se cumplía aun la promesa. Sara la mujer de Abraham sabia de la promesa y quiso ayudar al Dios todo poderoso de Abraham, dándole a Agar, su esclava, para que Abraham la tomara por esposa y así tuvieran un hijo para que de todas maneras se cumpliera la promesa, pero lo que no sabía Sara era de que no era a su manera era a la manera del Dios Omnipotente de Abraham, tanto Sara como Abraham tienen parte de culpa Sara por no haber confiado en la bendición de Dios y Abraham por no poder haber dicho que NO a las palabras de su esposa Sara. El libro santo registra que se cumplió la promesa con Sara, Dios les concedió un hijo que le puso por nombre Isaac el hijo de la verdadera promesa.
Se sabe que Ismael el hijo de Agar viene la descendencia de los árabes y de Isaac el pueblo israelí, es por eso que los árabes se tienen un gran resentimiento y odio hacia los judíos, claro que lo judíos también no son nada puritanos por a veces muestras características de altivez porque con quien dice, ellos vienen de un descendencia de bendición, aun así Dios no los ha desamparado a ninguno de los dos pueblos, al contrario los ha bendecido y prosperado tanto a la descendencia de Ismael y Isaac.
Pienso que aunque Sara haya cometido un grave error, Dios toma de nuestros errores para cumplir su propósito y aunque parezca difícil de pensar eso, siempre habrá un resultado que puede ser malo como positivo pero eso sí, todo dentro de la voluntad de Dios , creo que tanto Ismael como Isaac estaban en los planes del Altísimo.
La respuesta se podría resumir en una historia que se encuentra en el libro santo, trata de Sara, la esposa de Abraham, la cual era avanzada edad al igual de Abraham, ellos no podían tener hijos, pero cierto día el Dios de Abraham se le apareció en su tienda y le hizo una promesa a su siervo Abraham de tener hijos, de poseer una descendencia incontable más que las estrellas del universo y la arena del mar, que mas que promesa parecía una utopía, pero a la vez una bendición.
El siervo Abraham confiaba en la promesa de su Dios, pero la situación se ponía cada vez más difícil ya que pasaban los años y no se cumplía aun la promesa. Sara la mujer de Abraham sabia de la promesa y quiso ayudar al Dios todo poderoso de Abraham, dándole a Agar, su esclava, para que Abraham la tomara por esposa y así tuvieran un hijo para que de todas maneras se cumpliera la promesa, pero lo que no sabía Sara era de que no era a su manera era a la manera del Dios Omnipotente de Abraham, tanto Sara como Abraham tienen parte de culpa Sara por no haber confiado en la bendición de Dios y Abraham por no poder haber dicho que NO a las palabras de su esposa Sara. El libro santo registra que se cumplió la promesa con Sara, Dios les concedió un hijo que le puso por nombre Isaac el hijo de la verdadera promesa.
Se sabe que Ismael el hijo de Agar viene la descendencia de los árabes y de Isaac el pueblo israelí, es por eso que los árabes se tienen un gran resentimiento y odio hacia los judíos, claro que lo judíos también no son nada puritanos por a veces muestras características de altivez porque con quien dice, ellos vienen de un descendencia de bendición, aun así Dios no los ha desamparado a ninguno de los dos pueblos, al contrario los ha bendecido y prosperado tanto a la descendencia de Ismael y Isaac.
Pienso que aunque Sara haya cometido un grave error, Dios toma de nuestros errores para cumplir su propósito y aunque parezca difícil de pensar eso, siempre habrá un resultado que puede ser malo como positivo pero eso sí, todo dentro de la voluntad de Dios , creo que tanto Ismael como Isaac estaban en los planes del Altísimo.
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